Quienes han decidido tomarse un tiempo antes de ingresar a la universidad —ya sea para estudiar inglés en el extranjero, trabajar o simplemente explorar otras experiencias— pueden encontrarse con que su bachillerato no equivale al Year 12 australiano, sino al Year 11. En esos casos, el Foundation Year de 12 meses es una excelente opción. Este programa permite reforzar áreas clave, especialmente en lo académico, donde el inglés que se utiliza es muy distinto al inglés general. Además, es una gran oportunidad para adaptarse al acento australiano (¡mate! No es difícil, pero sí puede sonar extraño al principio) y al de otras culturas, ya que las universidades australianas son entornos altamente internacionales, con estudiantes de todos los rincones del mundo.
Consejo útil: ¡Hazlo! Es como entrar primero a una piscina pequeña antes de lanzarte a la olímpica. Este año te ayuda a adaptarte gradualmente a la ciudad, a las personas, a la vida universitaria y a la cultura australiana. Cuando llegue el momento de empezar tu carrera, ya tendrás la confianza, el nivel de inglés y las herramientas necesarias para desenvolverte con seguridad y saber cómo buscar ayuda si la necesitas.