El pasado 4 de mayo se llevaron a cabo las elecciones federales en Australia, con una victoria decisiva para el Australian Labor Party (ALP) y la reelección del Primer Ministro Anthony Albanese. Uno de los temas centrales durante la campaña fue la migración. Pero ¿cómo podría afectar este resultado a quienes desean estudiar, trabajar o establecerse en Australia? 

La reelección de Albanese asegura la continuidad de la estrategia migratoria anunciada en diciembre de 2024. Esta política se centra en una reducción gradual de la migración neta, la retención de trabajadores calificados y la implementación de reglas más estrictas para estudiantes internacionales y residentes temporales. 

Es muy probable que como resultado de las Elecciones en Australia 2025 las estrategias actuales y sus reformas progresivas sigan su curso. Entre los principales puntos que se mantendrán destacan: 

• El programa humanitario seguirá ofreciendo 20,000 plazas anuales. 

• Las visas patrocinadas por empleadores (sponsor), como la Skills in Demand Visa (Subclase 482), continuarán siendo clave para atraer talento calificado. 

• El gobierno mantiene una oposición significativa al restablecimiento de la Visa de Inversionista. 
• Se ha confirmado la revisión de la Ley de Discriminación por Discapacidad en 2025, particularmente en lo relacionado a temas migratorios. 

1. Aumento en el costo de la visa de estudiante y mayores exigencias

Durante la campaña, el Partido Laborista anunció un incremento en el costo de la visa de estudiante, que pasará de AUD 1,600 a AUD 2,000. 

Además, se prevé que se eleven los requisitos del idioma inglés y se apliquen controles más rigurosos para asegurar que los solicitantes sean estudiantes genuinos. Aunque no se ha planteado un límite oficial en la cantidad de estudiantes, estas medidas podrían reducir el volumen de solicitudes. 

2. Revisión del sistema de puntos para migración calificada

El sistema de puntos, utilizado para evaluar la elegibilidad de los migrantes calificados, está siendo revisado. Algunos de los aspectos que se encuentran en evaluación son: 

• La permanencia o no de la Skilled Work Regional (Provisional) Visa – Subclase 491. 

• La validez de los puntos otorgados por habilidades en lenguas comunitarias (puntos NAATI). 

• La posibilidad de otorgar puntos adicionales a solicitantes con parejas que posean experiencia laboral. 

A pesar de promesas para agilizar procesos, los tiempos actuales de espera siguen siendo prolongados: 

• La visa Skills in Demand, que prometía procesarse entre 7 y 14 días, actualmente toma entre 46 y 84 días. 

• Las visas de trabajo Subclase 482 presentan demoras de 6 a 9 meses. 

• Las visas permanentes patrocinadas por empleadores (Sponsor) pueden tardar hasta 18 meses. 

Estos retrasos generan frustración tanto en las empresas que necesitan talento como en los solicitantes que esperan una respuesta. 

La victoria del Partido Laborista ofrece cierta estabilidad, especialmente para las empresas que dependen de trabajadores calificados extranjeros. No obstante, deberán prepararse para afrontar mayores costos y una regulación más estricta, especialmente en lo relacionado con estudiantes y graduados internacionales. 

Para los futuros estudiantes, es crucial planificar con anticipación y mantenerse informados. Una fecha clave es el 1 de julio de 2025, cuando comienza el nuevo año fiscal, momento en el que podrían entrar en vigencia muchas de las nuevas medidas. 

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